Pablo y Leidy saben de futbol y lo enseñan a más de 100 niños y niñas en la escuela TALENTOSOS de Pensilvania Caldas

Esta es otra historia -pero no una más- es otra muestra de que con decisión y confianza en uno mismo

Esta es otra historia -pero no una más- es otra muestra de que con decisión y confianza en uno mismo se pueden lograr cosas. Al menos así lo demuestran los hermanos Ocampo   Ramirez -Pablo Alejandro y Leidy- quienes se dieron a la tarea de la escuela de fútbol Talentosos Pensilvania con el propósito de compartir sus amplios conocimientos en este deporte y brindar a los menores una alternativa para su tiempo libre.

La disciplina es su pilar fundamental

“De la disciplina se desprenden muchas cosas como el respeto…” dice Pablo Alejandro quien sostiene que esto no es negociable en la escuela, por eso están en contacto permanente con las instituciones educativas para coadyuvar con el buen rendimiento de los alumnos.
Los propios pequeños reconocen y valoran la seriedad y lo estricto del trabajo y creen que es un aporte importante para su vida y su futuro. 

Los padres de familia tienen plena confianza

El conocer las capacidades y el profesionalismo de los profes, les genera toda la seguridad para confiarles la integridad de sus pequeños y además apoyan el proceso desde sus posibilidades.